jueves, noviembre 24, 2005

Mente...


Dejad que comparta con vosotros una vez más otra reflexión: ¿Qué es lo que nos hace tan infinítamente complejos? ¿Qué es lo que nos acerca más a unos y nos aleja a otros? Nuestros gustos, nuestro carácter, nuestro modo de vida... todo. ¿De qué depende todo?.

¿Qué es la mente? Recuerdo haber estudiado en filosofía - no veas si hace años - que la mente no se limitaba a la estructura física con la que pensamos, hablamos, etc... es decir, no estamos hablando del encéfalo (cerebro, cerebelo y demás cosillas). Ese sería el soporte físico, razonable, dónde se generan nuestras actividades, donde se gestiona todo lo dicho y demás. Pero la mente no es eso, o al menos no sólo eso.

Ante la postura religiosa de que toda persona posee un alma, surge la alternativa de la posesión de una mente. Es decir, para entendernos, según entendí yo la mente es como nuestra alma, sólo que ésta no existe según muchos filósofos (ya sabéis que filósofos, como de todo, los hay creyentes, agnósticos, ateos...), es, por tanto, ese sustituto del alma -este símil está muy simplificado aquí, ¿eh?-. La mente trasciende por tanto el sistema nervioso, que queda relevado a un plano de control físico para que puedan darse lugar todas las reacciones que tenemos. Esos impulsos eléctricos, algunos voluntarios y otros involuntarios. Pero gracias a nuestra mente nosotros nos abstraemos y somos capaces de concebir cosas inimaginables, de rallarnos con paranoias supremas (como ésta) o visualizar cosas más allá de nuestras narices.

Por supuesto, esto que yo estoy tratando aquí es desde un punto de vista totalmente profano. Vamos, que no empleo mucho rigor científico. Ni siequiera digo que sea exáctamente lo que yo pienso, puesto que no me atrevería a aventurarme sobre lo complejo de nuestro ser.

Sin embargo, cuando realizamos ciertas tareas de abstracción, se ha observado que trabaja todo el encéfalo a la vez. Cada parte de nuestra cabecita funcianando a una determinada intensidad (eléctrica). Mientras que realizando tareas simples de habla o cálculo, etc... bueno, cada una tiene su parte dedicada.

Todo esto me da que pensar. Se puede teorizar de forma incalculable sobre ello. Entonces, haciendo un poco de flashback sobre mis propias publicaciones o post o como se llamen: ¿puede un loco estar "enfermo" de sistema nervioso y tener una mente pura? o por el contrario ¿puede que posea una mente "atrofiada" dentro de lo que llamamos normalidad y tener un sistema nervioso brillante?, ¿tendrá el amor residencia en nuestra mente o quizá en un lugar cerebral? ¿o en ambas residencias ?... Si los animales pudieran enamorarse (se dice que los hay que se enamoran, no se yo), ¿tendrían mente entonces? Por analogía si fueramos religiosos... mmm... ¿Tendrían alma? -uf, no voy a teorizar sobre si tendrían cielo o infierno, ¡que ya es demasiao por ahora!-, ¿hasta que punto podemos considerar fusión de sistema nervioso-mente o viseversa?, ¿hasta que punto están relacionadas y dependen la una de la otra, hasta el punto que una de ellas no existiera (ya sabemos cual) y todo esto fueran chalauras?. ¿Nace la mente de nuestro cerebro? como una ilusión más...

Una vez más me veo inmerso en un mar de telarañas. Intentando abarcar temas que se escapan al entendimiento. Porque siempre ha sido un misterio el por qué somos como somos, sentimos como sentimos, porque nos diferenciamos tanto como individuo y nos parecemos tanto como colectivo... en resumen, porque somos tan infinítamente complejos. Y en mi opinión el dejar todo el peso de esta explicación a la espiral genética que nos compone... puede ser cierta, pero me parece pobre y simplista. En fin, supongo que habrá gente que tenga que decir algo al respecto. Toda opinión sea bienvenida.

Bueno, me sigo rallando, hasta otra.

lunes, noviembre 21, 2005

¿Será que yo la veo con otros ojos?


Hoy quiero tratar, de refilón, un tema que yo considero ocupa más lugar en nuestra cabeza que muchos otros. Y cuando digo de refilón quiero decir que es mucho más complejo de lo que yo voy a exponer aquí, y cuando digo que ocupa más lugar me refiero a que le dedicamos un espacio muy especial y todo el tiempo del mundo en nuestras vidas.

Bueno sí, ya se ve venir por dónde van los tiros. Voy a hablar de esa enfermedad que nos aturde a todos alguna vez: el amor.

Esa emoción humana que nos encoge el alma y nos la exprime hasta el punto de cambiarnos como personas. Esa sensación que nos distrae de cualquier otro acto productivo y nos concentra sobre nuestro verdugo. ¿Nadie se ha parado a pensar en que sin esta distracción nuestro tiempo de quedarnos absortos pensando en las musarañas lo habríamos dedicado a hacer algo “mejor” con nuestras vidas o con la de los demás? Pero que hermoso es ese sentimiento, ¿no es cierto?. Así que sintiéndolo mucho, no podría imaginarme una vida sin él.

Sobra decir que gozamos de increíbles obras de arte inspiradas en este sentimiento. Que ha sido la musa del amor la que más veces a soplado a los genios y ha cubierto de laureles sus almas o las ha arrastrado cruelmente por el suelo.

Pero a ver... ¿alguien es capaz de darme una definición exacta del amor? Muchos han hablado de él y han dado vagas definiciones. ¿En que puntó se torna odio, celos, desesperación…? ¿Es el amor un sentimiento puro, de bondad altruista o de egoísmo o búsqueda de bienestar propio? ¿Puede alguien afirmar que el amor no existe? O por el contrario… ¿Puede afirmarme que existe el amor eterno?, ¿y el amor sincero?. Se me agolpan las dudas en la cabeza. ¿Es cierto que sólo los que hemos estado enamorados sabemos realmente lo que es eso?....

Nos pasamos gran parte del tiempo de recorrido de nuestras vidas con la esperanza de encontrar ese alma que encajará con nosotros. No es necesario que vayamos buscándola, simplemente esperamos que algún día aparezca. Envidio a aquel que prescinda voluntariamente de esta esperanza y surque el camino de su vida felizmente. ¿Y realmente merece la pena ver realizado ese sueño?; Dicen los científicos que el amor como se entiende químicamente, es decir, como el conjunto de enzimas que se desprenden y nos provocan esa sensación de cosquilleo, esa desenfrenada pasión irresistible… todo… es meramente pasajero. ¿Cuánto durará eso?: ¿un año?, ¿tres?... Como enamorado del amor me niego a pensar que es eso cierto. ¿Es correcto simplificar el amor a su estado químico y salvaje? Es verdad que me hago demasiadas preguntas, pero también lo es que ninguna respuesta será válida al cien por cien.

No obstante, a veces encontramos a esa persona. Y creemos que ya está todo hecho. Ya no existe esa “búsqueda” del alma gemela. Tú le amarás eternamente y ella a ti también. Y sin embargo, esto tampoco es siempre cierto. ¿Debemos perder entonces la fe en este “absurdo” sentimiento?

En fin, no se puede abordar de forma lógica y ordenada algo tan grande como es el amor. Al menos no en pocas líneas. Y más aún cuando su sentido es un encriptado jeroglífico para nuestras mentes. ¿Pues dónde falla más la razón y el sentido común que en un espíritu enamorado?

Algunas reflexiones típicas de un enamorado:

“¿Por qué me desvivo yo por ella? Cuándo ya ni siquiera me dedica una sonrisa.”
“¿Por qué sigo buscándola en mis sueños, sin poder arrancármela de la cabeza…?”
“¿Por qué ese perfume lleva el aroma de sus besos a mi memoria?”
“¿Por qué nadie la ve como yo la veo? ¿Y por qué ella no me dedica ya esa mirada suya?”
“¿Será porque yo la veo con otros ojos?”

lunes, noviembre 14, 2005

Loco



"Me preguntáis cómo me volví loco. Fue del modo siguiente: Hace mucho, muchísimo, mucho antes de que hubieran nacido los dioses, desperté de un profundo letargo y noté que todas mis máscaras habían sido robadas. Sí, las siete máscaras que yo mismo me había hecho y utilizado en mis siete vidas. Y sin máscara corrí por las calles llenas de gente gritando: ¡Ladrones! ¡Malditos ladrones!

Hombres y mujeres se rieron de mí, y muchos se refugiaron en sus casas, con miedo.

Y cuando llegué a la plaza del mercado, un joven que estaba de pie en la azotea de su casa, gritó señalándome: ¡Es un loco! Alcé los ojos para mirarlo, y fue entonces cuando el sol bañó por primera vez mi rostro desnudo. Por primera vez el sol bañó mi rostro desnudo y mi alma se hinchió de amor al sol, y no quise volver a tener máscara desde entonces. Y como en trance grité: ¡Benditos!, ¡benditos los ladrones que robaron mis máscaras!

Así fue como me volví loco.

Y entonces encontré tanta libertad y seguridad en mi locura; la libertad de la soledad y la seguridad de no ser nunca comprendido, porque quien nos comprenden nos vuelven esclavos.

Mas no dejéis que me enorgullezca demasiado de mi seguridad; ni siquiera el ladrón encarcelado está a salvo de otro ladrón."

"El Loco", Gibrán Jalil Gibrán.
¿Y cuántos de nosotros nos resistimos a desenmascararnos, esclavizando nuesto espíritu por temor a ser señalados como locos? ¿A cuántos hemos prejuzgado y señalado nosotros como tal? ¿Nos detuvimos a ver su interior? No, porque ellos tienen la seguridad de no ser comprendidos. Llamadme hoy loco, quizá me sienta un poco más libre.

viernes, noviembre 11, 2005

Y sin embargo...


Y sin embargo se puede besar el Sol. Pues nuestra imaginación va más allá que la realidad. Esa es su indescriptible magia. Ayer hablaba de algo tangible. Pero debo decir que soy bastante partidario de los sueños. Aunque siempre hay que tener los pies en el suelo, es cierto.

¿Qué sería de nosotros sin sueños?, ¿y sin un objetivo que alcanzar?. Pero no sólo eso,que sería de mí sin un mundo que hacer girar en mi cabeza. La belleza que me suscita el hecho de poder imaginar parajes perdidos y mágicos, de extraviarme en senderos jamás visitados. Dejar volar la imaginación y sentir a dónde me lleva.

Pues sí, la capacidad de abstraernos de la que tanto presumimos por diferenciarnos en gran medida de un animal es a mi parecer a la vez una de nuestras más poderosas armas. Una vía de escape temporal que alimenta en parte nuestro ego o nuestra espiritualidad. Bueno, esta sería tan sólo una de sus ventajas... pueden ser tantas como alcances a imaginar.

Estos sueños a veces podemos tornarlos realidad física, como en el caso de viajar a lo profundo de un océano o cruzar el cielo habiendo nacido sin alas. Pero entonces es cuando en cierto modo pierden su magia... Por eso adoro cualquier expresión imaginativa o artística en la que se muestre que tenemos viva esa parte de nuestro interior, que palpita en nuestra mente esa inquietud de asociar cosas aparentemente irreales y devolverlas afuera como reales. Ese entretejer de ideas inacabables y colectivas que mantienen el mundo de fantasía. Ese personaje que crea el escritor y que parece tener tanta vida como yo, o ese lugar que dibuja el artísta plagado de hadas y en el que me gustaría descansar un instante de mi vida. Esas notas musicales que se hilan en el aire con el toque mágico que el genio supo darle y llegan a mis oídos para recrearse. ¿Acaso no es la expresión artística, en una parte considerable, fruto de la imaginación?

jueves, noviembre 10, 2005

¿Se puede tocar el Sol?

La sonda Venus Express, lanzada por la Agencia Espacial Europea (ESA), partió ayer mismo para realizar un viaje de 400 millones de kilómetros de la Tierra. Se calcula que llegará a la atmósfera de Venus el próximo abril y que la orbitará durante 500 días. Dicha sonda está equipada con instrumentos de observación y medición basados en anteriores misiones de la ESA con la intención de completar los estudios que están llevando a cabo en Marte...

Para justificar dicho despliegue de recursos, a parte de la satisfación personal de cada uno de los ingenieros y científicos que se frotan las manos con esto, tenemos que fijarnos en las características de este bello planeta que ha suscitado la creatividad y leyendas de los humanos desde hace siglos. Las temperaturas en Venus superan los 450ºC. Ojito, estas temperaturas superan a las de su vecino más próximo al Sol, Mercurio. Si señor, y esto es debido al efecto invernadero. ¡Ahá! aquí está la clave... ¿podrá esto desvelarnos los misterios del cambio climático en la Tierra?... Francamente, no lo se. Pero espero que sirva para algo, pues se invierte en este proyectillo 200 millones de eurillos (que es una cantidad muy inferior a las misiones de la NASA).... [bla bla bla bla].

Incansables exploradores... así definiría una parte de la naturaleza humana. Al menos la parte curiosa de nosotros. Siempre con miras a lo desconocido... es hermoso, lo se, hemos avanzado mucho y comprendido muchas cosas. O quizá mañana se derrumben todas las teorías por otra que las desbanque... y nosotros como hormiguillas pues seguiremos levantando nuestro imperio de quimeras en busca de la verdad absoluta.

Supervivientes extremos... otra forma de definir este tipo de inquietudes, que nos llevan a tratar de darle expliciones a todo y tratar de luchar por perdurar. Ya sea en la Tierra o buscando la forma de escapar de ella cuando no podamos habitarla (¿será esto realmente necesario?...).

Egoísmo, también extremo e incansable y además minoritario... porque la pregunta que yo me hago hoy es si realmente se invierten en estos proyectos tales cantidades, se mira al cielo sin posar primero los ojos en la Tierra (a la que habría que prestarle un pelín de atención... y me refiero a las personas que la habitan, además del resto de los seres vivos e inertes, que también), se produce un verdadero derroche económico sin ningún problema para surcar los cielos... en fin, que si todo esto se hace de verdad por el bien de la humanidad en un futuro o simplemente para satisfacer la curiosidad de unos pocos que sufren espasmos de placer viendo partir sus cohetes y realizando sus mediciones. No penséis que trato de ser radical con estas disertaciones. Ya se que los grandes descubrimientos de los científicos han ayudado a mejorar en general la calidad de vida de unos pocos. Sólo es una cuestión que me planteo... porque luego no veo el mismo despliegue en asegurarse que las ayudas a los más necesitados lleguen íntegras. O en cuidar el medio ambiente a la hora de efectuar pruebas nucleares o de cualquier tipo de armamento. Pero claro, puede que yo sea un ignorante en esta materia y esté mal informado, y que no lo vea no quiera decir que no se haga... no lo se.

miércoles, noviembre 09, 2005

¿Cual es tú punto de vista?

Hola a todos. Al fin me he decidido a crear un blog personal. Llevo tiempo dándole vueltas al hecho de publicar ideas o aficiones o cualquier cosa que se me pase por la cabeza en definitiva... y nunca me ha gustado demasiado la idea de compartir ciertas cosas personales con el resto del mundo. Ese es uno de los motivos por el que me resisitía tanto a publicar uno. Sin embargo, me pareció atractiva la idea de tener un pequeño rincón en este submundo inmeso y notorio que es internet... un rincón en el que expresarme y dejar parte de mí. Quien sabe cuanto tiempo permanecerán nuestros escritos en estas bases de datos. Ya se que hay más cosas y hazañas en la vida que llevarán nuestra firma, pero en cierto modo esta es una forma de perpetuar nuestras ideas y de nosotros mismos ver como evolucionan, y compartir eso es en parte un regalo. Y más teniendo en cuenta las opiniones que podáis aportarme.

Bueno, no quiero aburrir a nadie con estas divagaciones. Si alguien está esperando a que me presente debo decir, sin ánimo de ser descortés, que no lo haré ahora. Mis amigos ya me conocen y saben quien soy, y quien no lo sea y esté interesado en conocerme lo podrá hacer, pues hay tiempo para todo, y se tarda en conocer a una persona la infinidad de tiempo que le quieras dedicar.

Resumiendo, que agradezco esta oportunidad para expresarme y espero que os interesen los articulillos o rayadas que pueda publicar. No pretendo convertir este rincón en una zona de llanto en la que desahogar mi alma. Respeto quien lo vea conveniente, pero de momento espero poder guardarme eso para mí. De todas formas aún no se en función de mi estado de ánimo lo que aquí se publicará.

Gracias a todos por este ratillo que me habéis dedicado. Espero, a partir de ahora, satisfacer parte de vuestras mentes con ráfagas de la mía. Hasta pronto!